El Castillo San Cristóbal se levanta en el lugar que alguna vez fue la puerta este hacia la ciudad rodeada de muros del Viejo San Juan. La construcción en San Cristobal comenzó en 1634 y terminó en 1790, aunque se hicieron algunas modificaciones en el siglo XVIII. Su fuerte gemelo y más conocido, El Morro, fue diseñado para proteger la ciudad de ataques por mar; San Cristóbal vigilaba los ataques por tierra. Si está interesado en la historia, disfrute una caminata sobre las murallas, donde hace 500 años los soldados españoles hacían vigilancia. Si ama tomar fotografías de paisajes espectaculares, San Cristobal es una mina de oro, con sus vistas panorámicas de la costa desde el Viejo San Juan hasta el área de Condado y más allá. ¡Use calzado cómodo! Esta fortificación que cubre 27 acres (10 ha) es la más grande construida por los españoles en el Nuevo Mundo. Vea desde donde surgieron los primeros disparos de la Guerra entre Estados Unidos y España y revelará parte del intrincado sistema de defensa diseñado por dos irlandeses empleados por la corona española. No se pierda la “Garita del Diablo”, una casilla de centinela que, según una leyenda, devoró a los soldados que eran enviados allí para hacer guardia. Un laberinto de túneles se entrecruza bajo tierra, donde se encuentran los calabozos; las paredes externas caen unos 150 pies (45 m) sobre las rocas de la costa norte. El Castillo San Cristobal está abierto al público todos los días, de 9:00 a. m. a 6:00 p. m.Información extraída de National Park Service.
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